Ensimismados los poderes. Es su naturaleza propiemente humana. Los menos que somos mas solo escuchamos. Llegará aquel día que los menos que somos mas pesemos mas, no porque hambre ya no tengamos, al contrario tendremos mas. No habra camino que buscar, de todos los que hoy comienzan a cerrarse que parecían abiertos, nos dejan el mismo bajo el que andamos. Dice la canción: ¡A parir madres latinas!, ¡A parir mas guerrilleros! para que siembren flores donde existen basureros.
La historia es historia. A los que se les olvida tendremos que recordarsela. No ha habido cambio, seguimos en el rumbo de repetir el ciclo historico de artazgo de tanta corrupción. No le hemos llegado aún, pero falta muy poco. El tren neoliberal acelera, deja a más muertos en las vías del desarrollo. La ambulancia de filantropia no podrá más recoger a los muertos que no estan muertos.
Es terrible pensar que la herramienta por la que se erige la justicia, que es la ley, los mas que son menos la esten escribiendo y blandiendo a su antojo. Dura lex, ser lex, si, ya les tocará rendir cuentas a los mas que son menos y pesen lo que deben pesar.
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