A propósito del 18 de Marzo

Siempre se han dicho muchas cosas, buenas y malas sobre el petróleo, desde que se explota como recurso nacional y enajenado por el estado mexicano.

El petróleo mexicano es uno de los más baratos del mundo, y a pesar de todo, nuestra economía se basa en él. Entre otras cosas el petróleo sirve para financiar la corrupción, el hambre de los miserables de este país y las guerras de los Estados Unidos.

La corrupción es financiada por el petróleo porque permite que la economía del país se sustente en las ganancias que este genera, dejando lugar a que los impuestos generados por otros rubros sean mas fáciles de embolsar por nuestros funcionarios públicos. Que se financie a la economía nacional con recursos del petróleo no es incorrecto, que se los roben si. La gasolina la pagamos los mexicanos como si la importáramos, aproximadamente a un valor de 10 a 1. El presupuesto anual se basa en un precio promedio del petróleo y cuando hay excedentes como el año pasado por altos precios de este en el mercado internacional, se dice que se va a asignar a los sectores en que la asignación de recursos fue menor. Y nunca lo vemos reflejado.

El petróleo financia la miseria por todos aquellos programas de gobierno para el campo, donde se supone se pretende mejorar las condiciones de los campesinos que son lo que son más y los que mas menos tienen. Se realizan estudios de viabilidad para implantar proyectos productivos, que los campesinos propongan sus proyectos en un menú de posibilidades y luego se someten a aprobación por expertos en la materia. Al final resulta que los proyectos que se aprueban son a los de los compadres del presidente municipal que generalmente son personas que no necesitan de financiamiento, y cuando se apoya a los que tienen tierras de temporal pues resulta en que la asignación del recurso es por hectárea y con unos cuantos pesos, que al final resulta ser que ese dinero ni se utiliza para lo que se planeaba pues al campesino se le enfermo el hijo de “calentura” y resulto que era algo más grave según dijo el doctor. Y ya ni alcanzo tampoco lo del “crédito a la palabra” o el “procampo”. Y el campesino termino todo endeudado y esperando a que le den más, pues no tiene de donde sacar más, aunque ahora que modificaron el “27 constitucional” puede vender sus tierras de donde sacaba de comer para irla pasando. (Ahora que si vende su tierra no tendrá mas que comer ni que vender). Se va para “el otro lado” al norte y a generar divisas verdes. Si, digo que financia la miseria porque si se quisiera que el campo mexicano saliera adelante las cooperativas y ejidos no debieron haberse dejado destruir, la política agraria mexicana siempre a sido desde hace ya décadas encaminada a volver a los latifundios y a que los campesinos vuelvan a trabajar para el “patrón”; aunque ya lo hagan en el extranjero. Nada más que en un poco más de tiempo si siguen las cosas no tendrán que salir para trabajar en la pizca de tomate, algodón u otras cosas.

Ahora los amigochos de “fotz” quieren su parte que les fue arrebatada oficialmente ese 18 de marzo de 1938, y se requiere de reformas, faltaba mas y esos recursos adicionales que se “requieren” para seguir manteniendo las instalaciones de PEMEX no son obra de un autosabotaje. Digo la especulación cabe por los hechos ocurridos en este organismo paraestatal en los últimos años.

Por eso y muchas cosas más no al la privatización del petróleo y si a un trabajo serio de auditoria en las operaciones de PEMEX y mejores proyectos de desarrollo. A la gente no hay que salvarla del hambre hay que enseñarle a que ellos mismo pueden salvarse y enseñar a otros a no morirse. Para eso hay que tener la idea de lo que este país debe llegar a ser para bien de todos.